La mamá que necesitas

Por la mamá del Fonchito

El nacimiento de mí Alfo significó quebrarme por dentro y fuera y como un fénix renacer de mis cenizas.

Hace tres años, el shock, la pena y el dolor, me llevaron a rechazar a mi hijo, porque no podía con tanto dolor.

Me sentí muy identificada al ver Wanda visión, cuando Scarlet Witch no puede tolerar lo que pasa con su vida y crea una realidad alternativa. Hay momentos en tu vida que lo que te está pasando es tan doloroso que no puedes y simplemente explotas, eso es un duelo.

En ese momento tienes que re evaluarte, dar significado a lo que te pasa, y entender que necesitas para re estructurar tu vida.

Es encontrarte con tus peores miedos, carencias afectivas, creencias sobre como es la vida y como eres.

Toda mi vida se me mostró que para triunfar tenías que ser el mejor, inteligente y perfecto. La vida me mando un niño que va a su ritmo y que no sabemos que va a pasar, y la ley de la perfección no se cumple en él. Simplemente el Fonchito, es imperfecto en cada célula de su cuerpo y es ahí cuando tuve que aprender que Dios no comete errores.

Por mucho tiempo sentí rabia con Dios de porque me lo mandó así, porque yo estaba siendo afectada, ¿Por qué a mí? fui víctima de mi propia vida, del universo y de mi pena. Hasta que me di cuenta que el problema era yo y tenía que trabajar en aceptar y construir mi propio ego y aceptar humildemente el gran regalo que era mi hijo.

Después de mucho trabajo, puedo decir iniciando mi entrenamiento para ser practicioner del método de Anat Baniel

Alfo tienes a la mamá que necesitas.

Que encontró y le dio significado a la vida, que el amor incondicional supera todas las barreras. Que ahora mi significado no es, por qué a mi, si no es como puedo mejorar tu calidad de vida, como puedo mejorar tu mundo y mostrártelo como es, lleno de colores y un lugar amable.

Que estoy atenta a tus problemas de desarrollo y sé cuales son tus retos, pero no veo tus carencias, veo donde estas en el ahora y como te puedo llevar adelante para que superes tus limites.

Que aún cuando escribo esto me cuesta mucho trabajo, mantener la mentalidad no basada en los limites, pero todos los días me repito a mí misma, nuestro límite es a donde tú me lleves.

Estoy orgullosa de donde me has llevado, por qué me llevaste más allá de mis limites y me mostraste como ser mejor mujer y persona.

Alfo gracias por esperar tanto, por soportar tanto, pero tienes a la mamá que necesitas para brillar en este mundo y para celebrar el maravilloso niño que eres.